Diferencias que Separan
En la vida existen diferencias que complementan y, que por ende unen, mientras que también están aquellas que separan. En el caso de Aries y Virgo, las diferencias distancian y hacen que la pareja en cuestión se distancie cada vez más debido a discusiones generadas por las diferentes formas de ser y de manejarse en la vida. Una de las principales diferencias de estos nativos es la velocidad en la que actúan, ya que mientras Virgo es metódico y va paso a paso, pero seguro, Aries es un torbellino que hace todo a una velocidad relámpago. A su vez, mientras Virgo evita tener que pagar las consecuencias de las acciones que se llevan a cabo sin meditarlas antes, para Aries el verse implicado en consecuencias de sus actos es parte de la aventura de vivir. Por ello es que este par de signos puede funcionar muy bien juntos como amigos, ya que ambos compartirán sus anécdotas y se reirán, ahora vivir juntos y planificar una familia, podría llegar a resultar en una eclosión de temperamentos que en lo único que puede derivar es en una violenta ruptura.
De la Teoría a la Práctica
Virgo es un signo cien por ciento planificador; todo lo que hace es primero evaluado y pasado por el tamiz de la razón. Ellos analizan los pros y las contras de toda decisión para finalmente tomar una determinación, de la cual difícilmente se retractarán. Son rectos y anteponen la obligación al placer. Para los Virgo es inconcebible llevar a cabo cualquier clase de emprendimiento sin haber sido antes cuidadosamente planeado. De esto se desprende que son muy estructurados y que el riesgo no es una opción para ellos. En otras palabras, los nativos de la virgen elaboran una cuidadosa teoría acerca de lo que desean lograr, para luego llevarla a cabo si la balanza se inclina a favor de lo que han planeado.
La Práctica Perfecciona
Al contrario de la forma de vida que llevan los nacidos bajo el signo de Virgo, los Aries viven al borde del precipicio, convencidos de que si algo no salió bien la primera vez, entonces habrá que seguirlo intentando. En su diccionario no está la definición de la palabra "agenda", ya que no planifican nada, sino que la espontaneidad es la que guía sus vidas. Todo aquello que tenga que ver con lo imprevisto y lo sorpresivo es lo que les motiva a seguir actuando de este modo.
Aprendiendo Juntos
Si existe una esperanza para esta pareja, esta radica en que ambos estén lo suficientemente receptivos como para aprender de su compañero. Si Virgo logra entender que lo espontáneo tiene su magia y que muchas cosas buenas surgen sin ser planeadas, estará a la altura de compartir su vida con un Aries, quien por su parte, también tendrá que aprender que no todo lo que uno hace en la vida surge de la nada, sino que los acontecimientos importantes merecen ser pensados dos veces. Recién en ese momento estos dos nativos podrán compartir el camino del amor.
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